DESDE LA VENTANA DE EDU, ESCOLAPIO

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Saturday, February 10, 2007

MATERIALES PARA LA CATEQUESIS LITÚRGICO - HOMILÉTICA

Hilo conductor de la enseñanza de estos 7 domingos del Tiempo Ordinario, para que tejiendo (relacionando) los hilos, (las ideas) de la Palabra de Dios, te hagas una tela (no hilos) para tu vestido de Bodas con el Codero, que está a la puerta, esperando

1er- DOMINGO TO:

1º- Al misterio de la ENCARNACIÓN (Navidad) se entra por el BAUTISMO:

a) Limpia
b) Da vida

2º.- DOMINGO TO

Primera revelación del contenido de la Encarnación , cuya puerta fue el BAUTISMO: Dios está enamorado de la Humanidad. Esponsales en Caná.

Escatología realizada. (No esperes al fin de los tiempos, que será la gloria y apoteosis de Dios), porque la escatología, el fin y el final de tu vida personal ya se está realizado, (Hoy se cumple) y acabará el día de tu partida o muerte, al unirte a la gloria de Dios en su Reino.

Y Teología de sustitución. "Recedant vétera. Nova sint omnia". La antigu Alianza queda sustituida por la Nueva Alianza. Con odres nuevos, sustituyendo a los viejos, para vino nuevo, de calidad manifiesta.

3º.- DOMINGO TO

Esta promesa de amores, de esponsales, se cumple ya “hoy se cumple esta escritura”.(escatología realizada)

4º.- DOMINGO TO.

Esta alegría y gozo lo tienes que anunciar al mundo entero, pues sus esperanzas son temporales y terrenales. Por eso se quiere despeñar a Jesús en su propio pueblo, en la propia Iglesia, porque anuncia un Nuevo Reino: fuera del tiempo y del espacio humano.

Pedro tenía también un esquema estrecho, pobre, erróneo del papel del Mesías y Jesús le increpó, ante su confesión y proclamación ambigua: "Tú eres el Mesías" . Pero en qué Mesías piensas, Pedro. Jesús le gritó: "Quítate allá, Satanas, ues tus pensamientos no son los de Dios, sino los de los hombres",

Solo el amor podrá llevarnos a todos a la victoria de una fraternidad universal, porque Dios es nuestro Padre, y renunciaremos a nuestras ideas y concepciones individualitas.

5º.- DOMINGO TO

¿Quién anunciará este portento? Aquí estoy con total disponibilidad, dice Isaías. El signo hecho realidad de un amor total del novio (Jesucristo crucificado-resucitado), que muere por la novia (humanidad); “porque no hay amor más grande que el de dar la vida por los amigos”. Y dice amigos, porque Jesús a todos sus enemigos, los ha hecho amigos: "Padre, perdónales, porque no saben lo que hacen". (Y le estaban crucificando.)

Hay que renunciar a la seguridad de nuestros conocimientos: “Maestro toda la noche hemos estado trabajando y no hemos pescado nada”. - Pero renunciando a sus conocimientos y sabiduría de pescador del lago-; “mas porque tú lo dices, echaré las redes”. “Y se fueron “mar adentro”… Ellos son llamados a realizar este portento y respondieron…: “Dejándolo todo lo siguieron”.

6º.- DOMINGO TO.

Documento Universal de Identidad (no el DNI, sino el DUI) de los Cristianos: Se consigue viviendo feliz, dichoso, BIENAVENTURADO al practicar los VALORES, que se nos revelan en la mismas Bienaventuranzas:

1.
pobreza de dinero de conocimientos y de amores; no estar atado, encadenado a nada.
2.
hambre de pan, hambre de Dios.
3.
llorar, sufrir, padecer por amor.
4.
persecución por la verdad, por la justicia, por el amor. Sin la confianza en esta escala de valores y poniendo la confianza en los contrarios, serás maldito, “porque maldito es el hombre que confía en el hombre”.

7º.- DOMINGO TO

Sin soñar hay que poner por obra esos VALORES de las BIENAVENTURANZAS: No a la venganza. Sí a la misericordia y al perdón. David pudo matar al rey Saúl… y le perdonó la vida.

La regla de oro de las Bienaventuranzas es: “Sed compasivos como vuestro Padre es compasivo”. Esa es tu dimensión. Esa es tu grandeza: como la de nuestro Padre-Dios.

La regla de oro para llevar a la práctica cotidiana este sentido y valor de las Bienaventuranzas: “Haced con los demás como queréis que los demás hagan con vosotros”


VISIÓN DE CONJUNTO
DE LA TELA TEJIDA EN LOS 7 PRIMEROS DOMINGOS
DEL TIEMPO ORDINARIO -CICLO C

Hilos sueltos: DESNUDO
Hilos tejidos: TELA


Con el entrelazado, o tejido de las ideas de la Palabra de Dios de cada domingo, podré tejer una TELA para hacerme un TRAJE de BODAS y poder entrar en el banquete de las Bodas del Cordero

NAVIDAD
Dios se ha encarnado, se ha hecho carne humana, se ha hecho humano con lo que comporta: sentir, pensar, amar y hacer

1ER DOMINGO TIEMPO ORDINARIO CICLO C

A ese misterio de ENCARNACIÓN se entra por el sacramento del Bautismo, bajo el signo material y sen-sible del AGUA:

a) el agua LIMPIA, LAVA todo PECADO
b) el agua da vida, el agua sacramental del Bautismo da una NUEVA VIDA

2º.- DOMINGO TIEMPO ORDINARIO CICLO C

Descubrimos al entrar en el misterio de la Encarnación, que en las Bodas de Caná, el novio es un ser anónimo, sin nombre, no sabemos ni cómo se llama, sin ninguna relevancia, sin importancia. Y cuando sale a colación, es para reprenderlo.

El verdadero protagonista de la BODA es Jesús, el hijo de María, con nombre y con señas.

3º.- DOMINGO TIEMPO ORDINARIO CICLO – C

Hoy se cumple esta escritura.

A
Aparece una teología de la SUSTITUCIÓN. El antiguo testamento o antigua linaza es sustituida por la Nueva Alianza o Nuevo Testamento. Los odres viejos por los odres nuevos. El vino viejo por el vino nue-vo

B
Y descubrimos una Escatología ya REALIZADA. Lo que me va a ocurrir al final de mi vida personal, ya está sucediendo, no hay que esperar a mi muerte para desposarme con Dios, el novio ya está aquí, ya ha llegado: Hoy se cumple esta escritura. Después de mi muerte acontecerá la Escatología del final de los tiempos para la gloria absoluta de Dios

4º.- DOMINGO TIEMPO ORDINARIO CICLO – C

El esquema del Mesías Salvador, anunciado por los profetas, pensado por las gentes de Nazareth, que representan a la gente del mundo, materialista, hedonista, egoísta, no coincidía con el esquema que está proclamando Jesucristo: la Salvación no es solo para el pueblo de Israel, sino también para todos los paganos. Hay que cuidar de modo especial a los más débiles, pobres, necesitados de todo. Y todo ello se rige no por las leyes del mundo, sino por el AMOR.

Por ello casi lo matan, al querer despeñarlo por un terraplén.

5º.- DOMINGO TIEMPO ORDINARIO CICLO –C

Esta Buena Nueva o EVANGELIO hay que proclamarla a los cuatro vientos. LLAMA a gente DISPONIBLE sobre todo. Pero estas gentes deben hacer antes la EXPERIENCIA de DIOS, de JESÚS

Pobres por completo, sin nada.

¿Cómo así? ¿Qué pasó? Es que antes habían hecho la experiencia de Dios, cuando Jesús subió a su bar-ca y lo dejaron subir y le hicieron caso de apartarse un poco de la orilla; y así sentado en al barca, en-señaba a las gentes y estos hombres se lo comían con los ojos y lo apresaban en su corazón. “Jamás hombre alguno hablaba como ese hombre”

¿Te pasa a ti lo mismo cuando lees y reflexionas en la Palabra de Dios de los domingos, al menos?

Y le siguieron haciendo caso cuando les pidió entraran de nuevo al lugar de los fracasos de la noche anterior, entrando mar a dentro a pescar. Tan pobres se quedaron, que renunciaron incluso a lo que sabían como pescadores avezados en la pesca

6º.- DOMINGO TIEMPO ORDINARIO CICLO C

Todos los domingos celebramos la RESURRECCIÓN DEL SEÑOR, su TRIUNFO. Por eso subyace en todos los domingos esta revelación quicio y clave de toda la vida cristiana: “Si Cristo no ha resucitado, vues-tra fe no tiene sentido”

Por eso, maldito es el hombre que confía en el hombre. Bendito quien confía en el Señor.

“Ellos sacaron las barcas a tierra, dejándolo todo, lo siguieron”

Hay que DEJAR TODO, quedarse

POBRE, SER POBRE.

TENER HAMBRE DE DIOS,
que es hambre de justicia, de amor y de paz.

SUFRIR, LLORAR,
sentirse impotentes, porque nuestra confianza la tenemos puesta en la fuerza del Señor, que acabará enjugando nuestras lagrimas y calmando nuestros dolores.

SER PERSEGUIDO,
insultado, odiado, excluido, proscrito hasta nuestro nombre por seguir a Jesús

Este es nuestro DNI, nuestro documento nacional (celeste) de identidad cristiana

7º.- DOMINDO TIEMPO ORDINARIO CICLO – C

Desarrollo del ESPIRITU de las BIENAVENTURANZAS

No te vengues. Perdona. Respeta. NO MATES. NO MATARÁS

No solo perdonar, ya que tenemos una capacidad mucho mayor, como hijos de Dios, para poder hacer mucho más: AMAD A VUESTROS ENEMIGOS, porque los tenéis que hacer primero AMIGOS.
Nuestra regla no es humana, terrena, sino celestial:

SED COMPASIVOS COMO VUESTRO PADRE CELESTIAL ES COMPASIVO. Somos casi dioses.

Edu, piariste

Wednesday, October 11, 2006

Nuestros Ancianos

11 de octubre de 2006
Querido JAVIER

Acaba de salir para Madrid el P. Miguel. Le despedí con pena. Me dijo había recibido unos versos que me pidió, le copiara de Teresa de Jesús, que iluminan y serenan.

Mi idea era aprovechando dos fotos del OTOÑO, que encontré y me impactaron enviar un correo-e a los ESCOLAPIOS JUBILADOS para darles un empujón sobre el OTOÑO de sus vidas, pero en estos veinte o treinta días, el P. Miguel que lleva más de un año, como tu bien sabes, luchando contra un cáncer, se nos ha venido abajo. No obstante el cosmos y la vida son tan infinitamente complicados, que no hay parámetros para medir sus fenómenos inconmensurables. Mejor es ver…

Te envío lo que he escrito para Escolapios jubilados y para el P. Miguel, que nos sirve de motivación suplementaria, pero él ya no llegará a leerlo. Nosotros sí. Y pienso más en nosotros que en él, que solo nos queda decir juntos: FIAT VOLUNTAS TUA.

Hace solo cuatro días, que tuve un momento a solas con él, le anime: Miguel, lo mejor para ti y lo más acertado, que no te equivocarás, es tener los sentimientos de Teresa de Jesús, cuando las cosas se ponen torcidas. Y le recite aquellos versos, que sé de memoria: “Dame vida, dame muerte… Y al día siguiente me pedía se los copiara…

Saludo cordial. Únete a la cadena de plegarias.


Un abrazo.
Edu, piariste


¨EL OTOÑO DE LOS ESCOLAPIO ¨JUBILADOS¨


Estáis en la edad de ORO, que es lo que más vale.

OTOÑO Y ORO.
El OTOÑO también es oro.>

Y tú estás ya vestido de OTOÑO Y ORO,
como el mejor torero,
dando tu pase de pecho,
envuelto en verónicas y molinetes.

Sois el mayor valor en bolsa de la Escuela Pía, que aun no ha descubierto, como les ocurre a las demás familias religiosas, el valor real que encierran en los activos de sus Comunidades.

Son dividendos que está perdiendo la Iglesia, porque aun no se ha encontrado, ni surgido el profeta que nos lo desvele, nos lo aclare y nos lance a la explotación de esa mina de valores auténticos de SABIDURÍA - CULTURA y SANTIDAD de miles de RELIGIOSOS JUBILADOS, que muchos de ellos están simplemente “aparcados”, porque en este momento es difícil saber qué hacer con ellos, con todo lo que ha costado a ellos y a las Familias Religiosas, llevarlos y llegar al nivel de riqueza humana y religiosa, que poseen y a la que han llegado.

Es un OTOÑO sin PROFETAS.
Pero ya es un buen síntoma esta preocupación que se va despertando en la Iglesia con tanto jubilado.


EL OTOÑO, es la estación de los FRUTOS.
Por eso estáis JUBILOSOS, ESCOLAPIOS JUBIILADOS,
por los muchos frutos almacenados a lo largo de vuestra vida.
Antes es imposible jubilarse.

Habría suspensión de trabajo, pero sin “júbilo”. Porque faltaría lo que tú tienes ahora en y con el OTOÑO de tu VIDA

Tú, ESCOLAPIO JUBILADO, ahora estás lleno del oro de la:
SABIDURÍA,
que se ha desarrollado en ti, por y con la experiencia de tu vida,

la CULTURA,
acumulada tras muchas horas de estudio y de lecturas, de exámenes como cualquier alumno y de trabajos mil.

y de la SANTIDAD,
con la que hoy te revistes, con tu fidelidad, después de tantas luchas de fe, de convivencia, de desesperanzas y desilusiones… tú lo sabes bien, porque es tu vida, revestida de pobreza, castidad, obediencia y de enseñanza escolapia.

No me seas modesto y hasta algo incrédulo, que de todo esto, de todos estos valores y virtudes, tienes algo, bastante, mucho o estás rebosando.

A tus treinta, cuarenta o cincuenta años, aun casi no los habías probado y de muchos, ni sabías que existían.

A mis 35 años, pregunté en una reunión, al P. Manuel Fidalgo, que ya podía ser mi abuelo: ¿Le gustaría tener mis años?

Me miró con una mirada pícara, complaciente y cómplice a la vez; y respondió: Claro que me gustaría tener 35 años, pero con una condición fundamental: SABIENDO TODO LO QUE SÉ Y TODO LO QUE CONOZCO DE MI Y DE LA VIDA.
Ahora lo comprendo:los años no valen.
Lo que vale es lo que has vivido con ellos.

ESCOLAPIO JUBILADO,
llénate de gozo en tu OTOÑO, cuanto más ocre y rojizo, mejor, porque tu tesoro está en tu SABIDURIA, CULTURA y SANTIDAD.

Los años que tienes no cuentan, ni tienen importancia en este cómputo del OTOÑO, ni cotizan en bolsa.
Es TU OTOÑO
Se viste de ocre rojizo,
como el oro viejo,
con amarillos dorados.

EL OTOÑO es:
policromía armoniosa de colores cálidos y maduros.
Los árboles se visten de oro y rojos de fuego.
Hojas y frutos, no se camuflan en una masa uniforme,
sino que se perfilan sus siluetas, sus formas y matices singulares.
Cada uno es cada uno.

El OTOÑO es
tiempo de verdades.
Tú eres tú y no se te confunde
con otro, ni con la masa, aunque el otro y la masa te hayan acompañado en tu proceso de trasformación y cambio.


El OTOÑO es
un grito de la naturaleza para renovarse.
Lo hecho, hecho está, lo mejor y lo peor, pero la naturaleza quiere lo mejor y aun mucho mejor y admite la muerte aparente, buscando otra oportunidad.

Y tú, Escolapio Jubilado, lleno del oro de tu OTOÑO,
sientes y entiendes el grito, hecho plegaria y pensamiento esperanzado de Martín Descalzo pocos días antes de abrir el “gran portalón”: Vio la LUZ
Y entonces vio la luz. La luz que entraba
por todas las ventanas de su vida.
Vio que el dolor precipitó la huida
y entendió que la muerte ya no estaba.

Morir sólo es morir. Morir se acaba.
Morir es una hoguera fugitiva.
Es cruzar una puerta a la deriva
y encontrar lo que tanto se buscaba.

Acabar de llorar y hacer preguntas;
ver al AMOR sin misterios ni espejos;
descansar y vivir en la ternura;
tener la paz, la luz en casa juntas
y hallar, dejando los dolores lejos,
la Eterna - Luz tras tanta noche oscura.

José Luis Martín Descalzo.

Nuestro hermano Miguel González Pérez
está viviendo su OTOÑO,
y quiere dejar “tanta noche oscura”

Solo os pedimos os unáis con la Luz de vuestra vida, hecha de plegaria y trabajo escolapio, a la de nuestra Comunidad “extendida” de Santander, con el P. Provincial a la cabeza, cuidando los detalles.

Miguel no está en condiciones de mirar el Power-Point adjunto
ni de leer nuestra suplica a vosotros hermanos escolapios.
Solo espera y cree en vuestra plegaria sentida.

Juntos todos rezamos;
“Fiat voluntas tua sicut in coelo et in terra”
y escuchamos el eco de la voz de Calasanz, que nos acompaña entre bastidores:
“Dios me lo dio; Dios me lo quitó. ¡Bendito sea su santo nombre!”

Y se fue con Dios en unos pocos momentos.

Edu, escolapio

Agradezco al sacerdote Manuel Millán Madrid, educador y coadjutor en Ojíjares (Granada)su colaboración como artista y técnico en el Power - Point adjunto. (se encuentra en este archivo)

Friday, September 29, 2006

CB - TOrdinario - D26 (Edu)

Eduardo Abad, Escolapio

Todos los domingos la liturgia de la Palabra de Dios, su Verbo hecho luz, hecho “carne”, quiere llenar de contenido la Eucaristía que celebramos.

Estos dos últimos domingos se ha insistido en la entraña misma de la Pascua, que es el misterio cumbre, el vértice al que tiende toda la historia de la salvación de la humanidad, la meta a la que se dirige Jesucristo y cuyo memorial celebramos y actualizamos en la Eucaristía, que es a su vez, la entraña misma de la Pascua, enmarcada en la Pasión y Muerte del Señor: por el desprecio que de él se hace, por su condena, en su fracaso, en su ejecución.

El Hijo del hombre tiene que padecer mucho, tiene que ser condenado por los senadores, sumos sacerdotes y letrados, ser ejecutado … Y resucitar a los tres días.

Y esto de sufrir y esto de fracasar no lo entendemos, o no queremos entender, ni preguntar. Sordos, pues y mudos.

Como nos lo decían de los apóstoles, el domingo pasado: que queremos ser el más importante del grupo, el primero y dominar a todos; de esto, nos dijeron discutían los apóstoles. ¿Lo recordáis?.

Ellos de lo que entendían y lo que querían era ser los primeros, los más importantes. Y cuando Jesús les preguntó de qué iban hablando y discutiendo, les dio vergüenza contestar; menos mal, que al menos les dio vergüenza. Jesús les mostró el camino de grandeza en su Reino: "Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos". Ese es el camino de Jesús, que al final, te hacen ser primero. Curioso, verdad.

Dios se da a todo ser humano y quiere que nosotros compartamos nuestras cualidades, recibidas de Dios.

Así nos lo han enseñado en la primera lectura de hoy:

El espíritu divino que Moisés había recibido, es el mismo Dios quien toma una parte y lo comparte con los 70 ancianos. Pero hubo dos que no estaban con el grupo y lo recibieron también para profetizar en Israel. Y esto molestaba al ayudante de Moisés, porque esos dos no habían estado con los 68, y le pedía que se lo prohibiera, porque el pobre tenía una visión estrecha de Dios y de sus dones y del futuro de su pueblo.
En el Evangelio de hoy se nos narra y se condena, esa mentalidad estrecha de tribu, de clan, de corral de gallinas.

Esta actitud de autosuficiencia, de voluntad de dominio y poder, de soberbia y de exclusividad, hoy nos lo vuelven a recordar, en la figura del apóstol san Juan, y eso que era el discípulo modelo, que preguntó él mismo;
“Maestro, hemos visto a uno que echaba demonios en tu nombre y se lo hemos querido impedir, porque no es de los nuestros”.
Quiere monopolizar, acaparar para él solo y para su grupo, para su clan, el poder de Jesucristo. Ser pues, el primero.

Juan y nosotros, cristianos de hoy, queremos monopolizar y acaparar para nosotros solos, y para la Iglesia católica el poder de Cristo. Ser, pues, los primeros.
¿Quién de nosotros no se ha dejado llevar alguna vez de un cierto sectarismo de grupo, diciendo: nosotros somos los primeros, nosotros somos los mejores, despreciando y condenado a "los otros?".
Bajo pretexto de solidaridad y de la defensa del bien y del Evangelio
¿no nos ha sucedido defender, de hecho, nuestros propios intereses?
Tenemos que renunciar a creernos los mejores.

Somos buenos o al menos intentamos serlo, y eso nos basta.

Tenemos que renunciar al monopolio del Espíritu Santo, que sopla cuando quiere y donde quiere y sopla más allá de las estructuras visibles de la Iglesia católica. Tenemos que abrir nuestro espíritu y nuestro corazón a todos los hombres y mujeres, que sin ser cristianos, sin ser de los nuestros, hacen también el bien que quiere el Santo Espíritu.

"No se lo impidáis",
fue la respuesta tajante de Jesús a la pretensión avasalladora de Juan.

Para ser discípulo de Jesús, para seguirle por ese camino de valientes, hay que renunciar a los esquemas de poder, porque nuestro único poder debe ser el servicio, la entrega, la donación de mi vida por todos los demás, sin distinción de raza, ni de color, ni de ideas, ni de religión. Es una nueva escala de valores, que son modo y manera de triunfar, consiguiendo esa nueva vida de la Pascua: muerte y resurrección.

Necesitamos una cura de nuestra soberbia y prepotencia, para que no se pueda decir de nosotros, lo que se decía del conde de Manzoni: "Era tan humilde. Que servía la mesa a los pobres. Y tan soberbio, que nunca consintió en sentarse a la mesa con ellos.

Si abrimos nuestro corazón al Espíritu para que quepan en él los nuestros y los otros, seremos como el Señor Dios, “que hace salir el sol sobre buenos y malos y caer la lluvia sobre justos y pecadores”. Y se podrá entones aplicar y decir de nosotros, por ser de Cristo, verdaderos cristianos, aquellas palabras de Jesús: “Os aseguro, el que os de de beber un vaso de agua, porque pertenecéis a Cristo, no quedará sin recompensa”. Y es porque entonces seremos otros Cristos.
¿Tú eres ya otro Cristo?
¿Cuánto te pareces a Él?...
Como servidores, hay que hacer siempre el bien, por pequeño e insignificante que sea lo que hacemos y a quien se lo hacemos.

Y en segundo lugar, hay que evitar hacer el mal, como el escándalo de nuestra conducta, por mínimo que sea y más si es a un pequeño a quien podemos dañar o destruir. Sería preferible para él, en palabras de Cristo; “que le ataran al cuello una piedra de molino y lo arrojaran al fondo del mar”.

Hay que seguir a Cristo por este camino de negación de uno mismo, destruyendo nuestro egoísmo, nuestra soberbia y nuestra lujuria. Hay que llevar la cruz, de cortarnos la mano, el pie, o arrancarnos el ojo en expresión hiperbólica, exagerada, para conseguir el Reino de Dios, que ese es su precio: el valor, la valentía, el coraje, el dar el todo por el Todo. “Para venir a tenerlo Todo –que nos dice San Juan de la Cruz- has de dejar del todo, todo…” Casi nada. Esto es solo para valientes. El Reino de los cielos solo lo arrebatan los que arriesgan todo. Este es el lenguaje del Evangelio. No se entiende eso de “Light”. Hoy todo es Ligh o lo hacemos enseguida “Light”: ligero, leve, llevadero, liviano…

La Eucaristía que vamos a celebrar es el gran memorial, la actualización de la Pasión de Jesucristo, que es camino de cruz: darse, entregarse, servir y morir a nuestro orgullo. Camino, que si lo transitamos semana tras semana, si participamos con nuestra vida, con nuestro ser, nos llevará al triunfo de la Pascua y a las Bodas del Codero.
AMÉN.
Edu, piariste

Thursday, September 28, 2006

CB - TOrdinario - D25 (EduardoA)

Así es, la EUCARISTÍA es un MISTERIO. No es un SECRETO.

El SECRETO, despierta nuestra curiosidad, encierra un riesgo casi siempre. Te involucra y te enreda en la trama de lo secreto

El MISTERIO, nos atrae, nos subyuga. El MISTERIO es un TESORO y el TESORO no produce miedo, El TESORO es simpre un bien. Siempre esperamos encontrar algo bueno.

Nos zambullimos en él, como el hombre rana en las bellezas misteriosas del mar. Gozamos cada vez más y más a medida que lo vamos descubriendo.

La PALABRA de DIOS es la llave para ir abriendo puertas de ese MISTERIO de la EUCARISTÍA, en el que se oculta Dios. Nunca llegaremos a comprender a Dios mismo, pero cada vez estaremos más cerca de la luz -la verdad; del amor -de la vida-vida; de la alegría -convertida en gozo...

Pero la PALABRA te guía por senderos difíciles: "El Hijo del Hombre va a ser entregado en manos de los hombres, y lo MATARÁN; y, después de muerto, a los tres días RESUCITARÁ"

Suerte en el seguimiento

Edu, escolapio


1a lectura: Sabiduría 2,12.17-20
2ª lectura: Santiago 3, 16-4,3
3ª Evangelio: Marcos 9, 30-37

Se nos recordaba en los domingos pasados, que la FE sin las OBRAS está muerta. Que nuestra FE, nuestros ritos y culto tienen que ser un COMPROMISO manifiesto con el descubrimiento que vamos haciendo de Jesucristo, como nuestro Redentor: todo los pecados nos los perdona; nuestro Salvador: nos salva de esta vida terrestre para darnos una nueva vida celestial, que no podemos ni imaginar; nuestro amigo: pues ya no nos llamará siervos, sino amigos, porque nos revelará todo lo sabe de Dios y de nuestra nueva vida.

Las buenas obras que hago no son para conseguir el perdón, ni menos para comprar mi salvación, que son un don o regalo de Dios, sino para demostrar mi agradecimiento mayúsculo a Dios que me perdona y me salva, repito como un don o regalo que me hace, porque está enamorado de mi. Me quiere, pues ”tanto amó Dios al mundo que le dio su Hijo unigénito, para que todo el que crea en él, no perezca, sino que tenga la vida eterna”.

Si no hago buenas obras es señal de que no creo en este amor enorme, que Dios me tiene; mi Fe está muerta, no existe. Las buenas obras son una señal para mí, de que creo de tal manera en el amor enorme que Dos me tiene, que yo no puedo responder nada más que con un amor “loco” por él. ¿No decimos que “amor con amor se paga”?.

Se nos decía aun más: que nuestro compromiso de agradecimiento, para que sea auténtico, tiene que pasar por la "prueba del dolor": por la pasión, por la muerte, como prenda o señal de la absoluta autenticidad. Tanto te quiero que estoy dispuesto, incluso a dar mi vida por ti. ¿No se dicen esto los novios, llevados de la pasión del enamoramiento? ¿No dicen que el oro se prueba y se purifica en el crisol? Oro auténtico. Amor auténtico.

Jesús comprometerá su vida y lo autentificará con su pasión, que le llevará al triunfo definitivo: "El Hijo del Hombre debe sufrir mucho, se nos decía el domingo último, debe ser rechazado por los ancianos que gobiernan, por los jefes de los sacerdotes, por los Escribas. Le matarán, pero TRES DíAS MÁS TARDE, RESUCITARÁ”.

Pedro y nosotros con él no entendemos este lenguaje. No interesa entenderlo, a nuestro egoísmo, a nuestra comodidad, a nuestro orgullo, a nuestra Fe pobre, por que nos falta el convencimiento del amor que él nos tiene. Nos resulta duro y hasta humillante. Es demasiado esto que se nos pide

Pues bien, este domingo nos vuelve a recordar Marcos, qué digo Marcos, el mismo Jesús, esta enseñanza porque debe ser bastante importante... muy importante y por ello insiste en esta idea clave para la vida cristiana, para el "seguimiento de Jesucristo: Jesús instruía a los apóstoles, diciéndoles: "El Hijo del Hombre será entregado a los hombres. Lo matarán, pero TRES DíAS DESPUÉS DE SU MUERTE, RESUCITARÁ."

De nuevo y siempre el anuncio del Misterio PASCUAL, como clave del sentido pleno de la VIDA. Todo el Evangelio de San Marcos, su enseñanza, su catequesis, nos conduce a este momento cumbre de la PASCUA. Curiosa "biografía" de un hombre: no es su VIDA lo que resulta importante, sino su MUERTE. Y ¡qué muerte! Lo importante es, pues, la dimensión de su amor mayúsculo por la humanidad. Por ti, por mi, por nosotros.

LA FE VIVA, que me hace creer en su amor “loco”, porque no lo entiendo, ni lo podré entender, hacia mí, me impulsa y me impele a preguntarle sin miedo: ¿Por qué me quieres tanto? ¿Qué ves en mí, que yo aun no lo he encontrado? Tu amor inexplicable me mueve a decir gracias hasta con mi vida si preciso fuera: “No me tienes que dar porque te quiera –porque aunque lo que espero, no esperara, -lo mismo que te quiero, te quisiera…”. Te quiero,,, porque te quiero.

Las buenas obras son una necesidad en mí, no para comprar nada, sino para expresar lo que le quiero. Eso es la FE VIVA.

Verdad es, que este hombre anuncia siempre y al mismo tiempo y de modo imperturbable, que él volverá a VIVIR después de la muerte... pero de otra manera, que se dice: "GLORIFICACiÓN"; Como si su primera vida no fuera lo más importante y la más importante.

¿Estamos convencidos de que Jesucristo está vivo hoy? ¿Realmente vivimos con el convencimiento de que esta vida terrena no es la más importante? ¿O estamos materialmente agarrados a esta vida y no dejamos un espacio, ni un resquicio para la esperanza de otra mejor y diferente?

Lógico, pues, que suframos el malestar y la angustia de la desesperanza, cuando el horizonte de nuestra vida lo limitamos y lo estrechamos a la dimensión de nuestro hedonismo y permisividad, (no hay moral) y desechamos las dimensiones del espíritu. No cabe entonces la fidelidad del amor y en el amor. Solo cabe el relativismo como norma de mi vida.

Hagamos una breve letanía de estos valores y contravalores: justicia, servicio, amor y paz, frente a injusticia, dominio déspota, egoísmo, odio y guerra.

Los discípulos y nosotros con ellos, no comprendían este lenguaje de sacrifico, de entrega, de servicio hasta la muerte. Y tenían miedo de preguntarle, nos dice el evangelio de hoy.

¡Pobres hombres, los apóstoles, como todos nosotros! Espíritus obtusos, limitados estrechos. Nos representan muy bien a los cristianos de todos los tiempos. A los de hoy; también a ti y a mi. No te escondas. Son una buena muestra de una humanidad corriente, pobre, vulgar.

Pero no cabe duda que estos hombres han tenido que vivir un acontecimiento único, espectacular, profundo, desconcertante, que les ha trasformado de tal manera, que se COMPROMETIERON hasta con su propia vida, a COLABORAR, a PARTICIPAR en ese inmenso movimiento histórico, de una nueva humanidad y desconocida y desconcertante, que de lo gregario, masa amorfa; de lo tribal, va camino de lo universal estructurado y pensado, donde el individuo pasa a ser persona, responsable en la "aldea" que ahora empieza a vislumbrase, cada vez más y más, que es una "aldea global". Es la "Ecclesia". La Iglesia: Asamblea de "hijos", que se van sintiendo "hermanos", porque descubren tienen un mismo PADRE.

La trasformación de estos apóstoles se descubre de forma notoria: de cobardes, (Pedro), egoístas, (Judas), soberbios, (Juan y Santiago), se convirtieron, el día de Pentecostés, en hombres valientes, desprendidos y serviciales. Pero antes de entregarse y comprometerse a esta llamada insistente de Dios, han tenido unos pensamientos y un lenguaje como el nuestro en tantas ocasiones: pensamientos de ambición, de escalar puestos, ser los primeros; puestos de honor y de poder, sirviéndose de los demás y no sirviendo a los demás. Es lo que hoy se repite dentro de las parroquias, en tu grupo de apostolado y de oración. Queremos descollar. Y no se libran de ello ni las diócesis, ni los que las regentan. Escuchad:

"De qué discutías por el camino, les dijo Jesús, que los había visto y sentido muy acalorados. Ellos se callaron (les dio vergüenza de responder. Menos mal), porque habían discutido entre ellos para saber quién era el más importante.

Este es el nivel de reflexión y de ambición de los Apóstoles, de nosotros, en contraste y contraposición con el camino, que Jesús les estaba trazando: "El Hijo del Hombre será entregado a los hombres, lo matarán". -"Si alguno quiere ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos."

En el CAMINO de PASIÓN que Jesús les está anunciando, él se hace el último, y será su servidor, hasta lavarles los pies.

Renunciará a todo, hasta su porte y dignidad humana. “No tendrá ni aspecto si quiera de hombre”, en el momento cumbre de su Pasión.

No hay otro camino para que nuestro COMPROMISO en el AMOR sea auténtico, que el de la Eucaristía, que es:

ANUNCIO Y ACTUALIZACIÓN DE LA PASIÓN, DEL DOLOR Y DE LA MUERTE (cuerpo entregado-sangre derramada, que repite el sacerdote en la celebración) Y DEL TRIUNFO DEL AMOR (ya no hay pecado, pues todo ha sido realizado, ejecutado, dado para la REMISIÓN DE LOS PECADOS)

Por amor murió en la CRUZ por nosotros. Por amor se quedó hecho pan para nosotros.

ESTO ES MI CUERPO, QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS. Habla de entregarse, de darse, de inmolarse, de ser entregado a la muerte. Ese es el CAMINO. No hay otro.

Es el CAMINO que San Juan de la Cruz lo bautizó y le llamó:

CAMINO DE LAS NADAS

Para venir a saberlo TODO, / Para venir del todo al TODO,
No quieras saber algo en NADA. / Has e dejar del todo, TODO.
Para venir a gustarlo TODO,
No quieras gustar algo en NADA. / Y cuando lo vengas TODO a tener,
Para venir a poseerlo TODO, / Has de tenerlo sin NADA querer.
No quieras poseer algo en NADA. / Porque si quieres tener algo en TODO,
Para venir a serlo TODO,
No tienes puro en DIOS TU TESORO / No quieres ser algo en NADA.
Para venir del todo al TODO,
Has e dejar del todo, TODO.

P. Eduardo MTNZ. Abad, escolapio

Libro recomendado para leer y pensar el EVANGELIO de los DOMINGOS. Librería Pastoral - Florida, 3 - Tlf. 942375474 Santander LA PALABRA DE DIOS PARA CADA DíA (tomo 1 ° Y 2°) por Noel Quessón. Editorial Claretiana

Tuesday, August 22, 2006

Día Calasanz - 25 de agosto de 2006

ESCOLAPIOS DE 35 PAISES EN CUATRO CONTINENTES

A un mes de la Fiesta de Nuestro Santo Padre, José de Calasanz 25 de agosto 2006

¡Y qué…, qué pasa!, pensaréis BASTANTES – me da vergüenza de decir MUCHOS - porque a lo mejor acierto. Claro que yo digo lo mismo o casi… no lo sé: ¡Y qué… qué pasa!

No quiero cargar la responsabilidad de una cierta indiferencia, dejadez, desidia, abandono…, qué sé yo, sobre el cariño, la devoción, el recuerdo confiado y agradecido a nuestro Fundador y Padre, San José de Calasanz. Esto ocurre también en buenas familias religiosas.

Lo que yo siento, cuando vamos a cumplir los 450 años de su nacimiento, 1557 – 2007, es que a mi me gustaría tener la devoción íntima y confiada de mi Padre Santo, y no quedarme tan solo en la publicidad, el ruido de la propaganda, cara o barata con motivo de los 450 años, o la fiesta rutinaria del 25 de agosto.

Este ha sido mi fallo:
quedarme en lo exterior.
Verdad es que tampoco me ayudaron mucho a vivir en lo interior, el interior de José de Calasanz, nuestro Santo Padre.

Así celebré la venida de sus reliquias – corazón y lengua - en 1948 - 300 años de su muerte - a su paso por el Monasterio de Irache. Bullicio, caminatas de más de 200 juniores escolapios por los pueblos de la merindad de Estella (Navarra-España), preparando con varios meses de anticipación el acontecimiento, con el entusiasta P. Rafael Pérez y Pérez (q.e.p.d) a la cabeza, maestro que era de Juniores. Se acababa de estrenar. ¡Y qué estreno!

Ruido, cantos y gritos, voces afónicas hasta la ronquera, aclamando al Santo. Todo eso no me ayudó a tener ese cariño, que siempre he echado en falta. Me faltó la mística de la devoción al Santo, que la tiene. Preguntarle, sino, entre otros, al P. Jesús Fernández, que ha entregado su vida a la Escuela Pía EN Colombia (incorrecto decir DE Colombia, porque la Escuela Pía no es de ningún país, es de la Iglesia y por consiguiente sin nacionalidad, porque lo es de todos los países. -"No hay ya judío o griego, no hay siervo o libre, no hay varón o hembra, porque todos sois uno en Cristo Jesús" (Gal 3,28).

No hay Iglesia DE Alemania, ni DE España, ni DE México, ni DE Córdoba. Por eso, porque somos Iglesia, nunca seremos extraños, ni extranjeros los Escolapios en cualquier país del mundo.

Me ha venido de repente hacer esta aclaración. Que si es claro, no hacía falta declararlo. Perdón por la digresión, pero quizá a alguno le abra la cabeza y le agrande el corazón)

El P. Jesús es uno que sabe mucho de todo esto y lo vive. Le tengo santa envidia. Se supo cultivar. Yo y otros muchos no lo hicimos así y ahora os pedimos ayuda, que nunca es tarde. Darnos vuestra devoción, cariño, y amor a Calasanz, que sentimos su falta, "antes de irnos" y despedirnos.

Pero también se la tengo a religiosos de otras familias religiosas y los admiro y lo comentamos a veces entre escolapios. Por ejemplo, a nuestros hermanos Salesianos. Meten a Don Bosco por todas parte, no solo como propaganda, sino con y por devoción, juntamente con su María Auxiliadora. Lo llevan en el corazón, porque desde “los más tiernos años” se lo trasmiten, como se trasmite la fe.

No quiero generalizar mi sentimiento de poca devoción, intimidad y vivencias místicas de Calasanz, mi Padre y Fundador, en mi corazón. Mi pobreza espiritual calasancia, sé muy bien no es la de todos, pero sí la de un gran número. “A fructibus eorum cognoscetis eos”. Y los frutos son la ausencia de señales internas y externas en mí y en bastantes ¿Cuántos? El número no interesa.

Yo lo confieso públicamente para que a mi y a “esos bastantes” nos ayudéis en estos treinta días de preparación a la Solemnidad de San José de Calasanz. Y después también, durante el año Centenario.

En la ayuda tenéis que poner
primero corazón:

¿cómo puedo ayudar a mis hermanos escolapios a despertar en ellos sentimientos de amor, de querencia, de cariño a Calasanz?
segundo, un bastante estar de “rodillas”:
que tu devoción a Calasanz te ayude y Dios te inspire lo que puedes hacer.
Quizás, y es solo una sugerencia, presentarnos relatos sencillos cortos y emotivos. Cada quince días un relato por Internet o siendo muy generosos, una simple hojita por correo, a las Comunidades. Llegaría a muchos que no tienen, ni pueden entrar ya en Internet.

Naturalemente en español, inglés y francés, al menos, sin excluir el latín, pensando en los estupendos escolapios del este de Europa.

Yo hago una traducción en francés de este correo, pero no tengo quien me ayude para pasarlo al inglés. ¿Se ofrece alguien?

Con textos conmovedores del Santo, donde se revela su mundo espiritual, amor a Jesucristo y a su pobreza -se casó con ella ¿qué es eso?- y pasión. Y una verdadera devoción a María.

Un TRIDUO dinámico, lleno, hasta con un DVD con cantos de Calasanz y de otros fundadores educadores que sea llamativa la letra. Recuerdo: “Tu me enseñaste a volar”. Y piezas musicales adecuadas.

Este TRIDUO para repetirlo todos los meses, los días 25, 26 y 27 de cada mes durante este año centenario u otros días. Y si hay una reflexión sobre Calasanz o de Calasanz mismo, que no se repitan en las doce veces que se haga el TRIDUO durante el año.

No sé si habrá algunos que cojan el guante. Escolapios preparados para ello, los hay. Lo demás corre por cuenta…

Hasta el 1 de enero del 2007 tenéis 5 meses, incluso para reuniros en la casa más adecuada para trabajar. ICCE, San Pataleo etc. Lo importante no es el lugar, sino que…

Pero... si yo creo que estoy soñando. ¡Qué cosas se me ocurren!
Y “los sueños… sueños son “¿verdad? ¿o no?

Ojala haya alguien que despierte


25 de agosto a la vista

Una pequeña ayudita para empezar a preparar la Fiesta de Calasanz del 25 de agosto, para que todos “soñemos “ un poco, sobre todo LOS JUBILADOS, que la OLA O BUCLE DE LA MAR y el POEMA lo entendéis, lo comprendéis y lo vivís mucho mejor por la sabiduría que se concentra y acumula con el “vivir prolongado”
- TU INMENSIDAD no la has descubierto todavía
- Es un RIESGO, sabes...
- No sabes ser OLA EN LA INMENSIDAD DE LA MAR
Abrazo cordial, fraternal y calasancio

Edu, escolapio

INMENSIDAD… / IMMENSITÉ…
Fiereza salvaje, / Fierté sauvage,
fuera de tu ser / hors de ton éter
y dentro de tu vida, / et dans ta vie,
en reto y lucha desigual, / un défi et une lutte inégal
en apariencia… / en aparence

Indómita la ola, / Indomptable, la vague,
embravecida en su grandeza, / qui se déchaîne dans sa grandeur,
es solo fugaz inmensidad. / elle est seulement une fugace immensité.
Tú, la tienes: la INMENSIDAD / Tu l’en as:l’INMMENSITÉ!
A ella, le falta. / À elle, lui manque.
¡Esa es tu victoria! / ¡C’est ta victoire!

“¡Quedar transformados por el esplendor de la belleza!”
“Rester transformés par le splandeur de la beauté”

Dieu Marie Calasanz “piariste”: / Dios… María… Calasanz… “escolapio”:
c'est la force de la beauté / es la fuerza de la belleza
dans l'équilibre des sentiments / en el equilibrio de sentimientos
et de la hardiesse du courage / y la audacia del coraje
pour que toi traverse / para que tú atravieses
“le vide sans porte” / “el vacío sin puerta”
de la “nouvelle vie” / de la “nueva vida”

Edu, piariste

Enhorabuena al ESCOLAPIO JUBILADO – au PIARISTE EN RETRAITE

Félicitation

¡Valiente! Te has jugado la vida a una carta: EDUCADOR CRISTIANO.
Solo te resta “atravesar “EL VACÍO SIN PUERTA”, como el surfista”
Il te reste seulement “traverser LE VIDE SANS PORTE”, comme le surfiste".


ONG KALASANZ
21 de agosto de 2006

Edu, escolapio

ESTAMPAS CALASANCIAS:

Tienen un doble objetivo:

1. para reflexionar,
en ambiente de intimidad y oración,
contemplándolo a solas en el lema del 450 aniversario del nacimiento de José de CALSANZ GASTON: “NACIDO PARA EDUCAR”.
Fue un hombre
estupendo,
generoso,
clarividente,
entregado en cuerpo y alma a su misión de EDUCAR. Hasta gastar su vida.
Fue, efectivamente un "GASTÓN", hasta 92 años "gastó".
Vale la pena contemplarle en estas "estampas" – Power Point que se añade - para sentir admiración, cariño, y "deseo de ayudarle."
2. para que vayas haciendo un balance de tu carisma calasancio: “EDUCADOR CRISTIANO”
  • ¿Cómo estás realizando y viviendo tu carisma o don de Dios?, ¿o cómo lo has realizado?
  • ¿convencido y contento?
  • ¿el proyecto de Dios sobre ti como Educador Cristiano, quedó maltrecho, truncado, a medio hacer o lo estás deteriorando y degradando con "accidentes novedosos"?
  • ¿Balance positivo, negativo?
    Si negativo, tienes la suerte de poder equilibrarlo, tú, ya jubilado, entregándote en cuerpo y alma a "pedir por las escuelas", a leer lo que no leíste para rezar con más conocimiento de causa e incluso a escribir algunos artículos sobre la Educación Cristiana para ayudar a navegantes inexpertos, que salen del puerto".

Estas "ESTAMPAS CALASANCIAS" ha sido una colaboración de Manuel Millán Madrid, escolapio de corazón, que llevó adelante su carisma de educador Cristiano en la Escuela Pública hasta jubilarse, siendo Vicario parroquial durante todos estos años de magisterio en la diócesis de Granada (España), donde continua al pie del cañón. Firma TRESEM (tres emes) Le decimos simplemente: Gracias, Manuel
Y que de este modo, TODA LA FAMILIA CALASANCIA celebre con un gran provecho
- espiritual-humano
- cristiano y escolapio,todo el año del Centenario 2007:
los 450 años del nacimiento de San José de Calasanz

25 agosto 2006
San José de CALASANZ
Pórtico del año centenario: 2007


Pio XII, en 1948 proclamó a San José de Calasanz
"Celestial Patrono ante Dios de todas las Escuelas Populares Cristianas del mundo".
Calasanz, fundó la primera escuela popular y gratuita del mundo, en Roma en 1597, adelantándose nada menos que 200 años a la organización de la escuela pública por parte de los Estados modernos. San José de Calasanz es por ley en muchos países patrono de las escuelas públicas, donde se le honra cada 27 de noviembre.

Felicidades
"Familia Calsancia"
y
"Educadores Cristianos
de todo el mundo

Edu, escolapio

Friday, August 11, 2006

Homilías Catequéticas sobre la Eucaristía

Con motivo de que el Papa Benedicto XVI ha manifestado que los objetivos de su Pontificado son: la Eucaristía y el Ecumenismo y dado que estamos en las semanas en que se comenta en la Misa el capítulo 6 de San Juan, me he atrevido hacer cinco catequesis sobre al Eucaristía, en ritmo espiral-ascendente, siguiendo las perícopas de los evangelios de los cinco domingos.

Pueden servir también de homilías, suprimiendo, y añadiendo aquello que vea adecuado por el que emplee este material para su comunidad pastoral o si preside la Eucaristía

SI TE INTERESA ESTE TEMA:
EUCARISTÍA Y QUIERES TRABAJAR PARA TI Y PARA LOS DEMÁS...¡ADELANTE!

SI NO, ESTO ES UN CORREO SPAM (ESPANTOSO)... Clic y A LA PAPELERA. Y tan amigos

LA EUCARISTÍA SEGUN LA REVELACIÓN,
CONTENIDA EN EL CAPITULO 6 DEL EVANGELIO DE SAN JUAN



Nos lo presenta la Iglesia durante 5 domingos, del 17 al 21

Se os ofrece a sacerdotes, catequistas, evangelizadores laicos, en pueblos con "misa seca", emisoras de radio, círculos bíblicos, renovación carismática, grupos apostólicos, religiosos y religiosas que deseen progresar, profundizando y bebiendo en la FUENTE y CULMEN de toda la vida cristiana.

una Introducción

cinco homilías - catequéticas, en progresión lógica en su hilo conductor

Están escritas en un estilo coloquial, que se pueden leer tal como están redactadas. Suprimir lo que juzguéis debéis suprimir, ideas repetidas.
… Y añadir lo que juzguéis se debe añadir


Ciclo B
Tiempo Ordinario
19 DOMINGO


1ª lectura: 1 Reyes 19, 4-8
2ª lectura: Efesios 4, 30_5, 2
3ª lectura: Juan 6, 41-51

Hermanos ¿os gusta vivir? ¡Qué pregunta! ¿verdad?
¡Claro que nos gusta vivir!

No lo ven tan claro los que se retuercen de dolores con enfermedades graves. No lo ven tan claro los que andan golpeados por la vida, porque no tienen trabajo y no puede dar de comer a sus hijos y a su esposa, o la desesperanza de aquel que le desalojan de la casa, en la que ha vivido más de cuarenta años, quedándose en la calle con su maleta en la mano. Sin recordar a tantos que no saben si hoy podrán encontrar en la basura algo para comer.

El profeta Elías, lo acabamos de escuchar, perseguido a muerte y cansado de huir por el desierto, “se sentó bajo una retama y se deseó la muerte: Basta, Señor! ¡Quítame la vida, que yo no valgo más que mis padres!”

Todos estos y muchos más han perdido toda ilusión de vivir. Soportan la vida.

No lo ven tan claro eso del gusto por la vida, los que se quedan sin amores, porque les hicieron traición y a pesar de su bienestar material, no encuentra sentido a su vivir vacío: sin ser amados, ni poder amar, cual animal salvaje, o piedra o mojón del camino, o árbol solitario en la estepa, que simplemente: ahí están.

Estos y muchos más desean morir y no vivir. Y tú, que deseas vivir y no morir, morirás como ellos. ¡Qué misterio este de la vida humana! ¿verdad?

La vida es bella, es hermosa, la vida es un éxtasis de alegría y gozo. Todos vosotros, como yo, hemos hecho alguna vez una experiencia de plenitud de vida: sensual y sentimental. Y sentimos se acabe aquel momento de vida plena, que hubiéramos desea no acabara nunca, como aquel baile con aquella muchacha llena de vida o aquella noche romántica que hubiéramos deseado no acabar nunca.

Otras veces hemos vivido una experiencia de vida afectiva, plena: el amor del hogar, de los padres, que nos costó perder y que seguimos llevándoles flores al cementerio después de tantos años. Esa otra experiencia de vida plena, de amor profundo, en compañía de aquella mujer, que fue la esposa de mis mayores amores, y que al morir, ha dejado mi vida vacía. Si la vida la viviéramos siempre en plenitud, nadie querría morir

Algunos habéis podido hacer la experiencia de una plenitud de vida intelectual. Qué gozo tan profundo, al lograr la solución de un problema difícil, en un examen. A nivel superior, de investigación, el gozo y la alegría es tal que hacemos locuras para los que no están inmersos en esa experiencia de vida plena del entendimiento.

Cuentan de aquel sabio griego, Arquímedes, que según se estaba bañando en su casa, llegó a contemplar y comprender intelectualmente, lo que andaba buscando hacía tiempo. El famoso principio físico sobre el volumen de los cuerpos, que se conoce y se le ha dado el nombre de principio de Arquímedes.

Fue para él un momento tan de plenitud de vida, de gozo intelectual, que dicen las historias, salió del baño, lleno de alborozo, desnudo como estaba, gritando por las calles de Atenas: ¡Eureka, eureka!, ¡ya lo encontré, ya lo encontré!

Vivió por unos momentos un gozo y alegría de esta plenitud intelectual que ni se dio cuenta de que iba desnudo. Lo superior olvida, deja de lado lo inferior. Vivir en plenitud, no cabe duda, que es algo hermoso, deseable y codiciable.

Si al enfermo crónico le quitáramos la enfermedad, si al que le persigue la desgracia lo inundáramos de buena suerte, si al que no se siente amado, se encontrara con una mujer o amigo a la medida de su deseo total, si al anciano decrépito, le pudiéramos dar un cuerpo joven, fuerte y sano ¿quién no quisiera vivir?

Pero esta vida humana solo tiene algunos momentos de plenitud de vida. Y tú y yo y todos, ansiamos una vida plena, una vida feliz, pero una vida plena para siempre, una vida eterna.

Queremos vivir y tú y yo y nosotros todos, que tenemos la gracia de ser cristianos, sabemos dónde y cómo y de qué manera podemos conseguir vivir para siempre y en plenitud.

No hay que ir al encuentro de Jesús buscando alimento que perece y nosotros con él, como sucedía con el maná en el desierto y con el pan que él mismo multiplicó: “Vuestros padres, dirá Jesucristo, comieron el maná en el desierto y murieron. Vosotros me buscáis no porque habéis comprendido el signo que os he dado al multiplicar los panes, sino porque comisteis pan hasta saciaros… Trabajad no por el alimento que perece, sino por el alimento que perdura, dando vida eterna.

“¿Y cuál es ese trabajo a realizar para conseguir el alimento que da vida eterna?” Y Jesucristo responde: “Este es el trabajo que Dios quiere: que creáis en el que él ha enviado”. Creer, confiar es un gran trabajo. Cuesta confiar, cuesta creer que el pan de Dios, el alimento de Dios, es el que verdaderamente baja del cielo y no el maná. Y además creer, que “ese Pan da la vida al mundo”.

“Señor, le dijeron, danos siempre de ese pan que da vida”. Jesús les responde: “Yo soy el pan de vida, el que viene a mi, no pasará hambre y el que cree en mi no pasará nunca sed. El que coma de este pan vivirá para siempre.”

¿Creo yo en Jesucristo? ¿Voy a Cristo a saciar mi hambre? ¿Cómo voy a ir a Cristo, sino creo en él, no tengo confianza en él, no es mi amigo, si no es un desconocido en mi vida? Porque lo que sé de él es como lo que sabían aquellos judíos: “¿No es este el hijo de José? ¿No conocemos a su padre y a su madre? ¿Por quién se cree?” Su conocimiento era superficial, de circunstancias, exterior, anecdótico.

Para tener vida hay que creer que este Cristo calma tempestades, cura las enfermedades incluso del alma, da nueva vida, porque él es el pan vivo que ha bajado del cielo y el que coma de este pan vivirá para siempre; y el nuevo pan que yo daré ES MI CARNE PARA LA VIDA DE MUNDO.

“No critiquéis, les dirá Jesús”. La fe no está al alcance de nuestro razonamiento, ni se consigue con nuestros aparatos científicos. La fe, creer, comprometer la vida por Cristo, es gracia, algo gratuito que da Dios Padre: “nadie puede venir a mi si el Padre, que me ha enviado, no lo atrajere”.

El mundo de la fe es maravilloso, no se razona, se vive y se ama y todo se entiende. Y esto es don de Dios. Dios no se compra, es gratis, como gratis es un regalo, que no se puede comprar. Si pretendes comprar un regalo, has pasado al mundo y al ámbito del comercio y has perdido la alegría, que produce el don, el regalo. Hay que pedirlo y no poner obstáculos al recibirlo, porque si no, no lo vives ni lo entiendes.

¿Te gusta vivir en plenitud? Con los alimentos de este mundo, “los alimentos terrestres”, te morirás, por mucho que comas. Son alimentos que perecen y tú con ellos.

¿Te gusta vivir? ¿Quieres vivir para siempre? Pues ya no se trata de comer el un alimento divino, sino de comer su propia CARNE: “Yo soy el pan de la vida… yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo daré ES MI CARNE PARA LA VIDA DEL MUNDO.”

La carne, es la misma persona, es el Yo que se expresa corporalmente. Es unirte, pues, a su misma divinidad. Es zambullirte como la ola en el mar.

Creer en Jesucristo, en sus Palabras, comprometerte con lo que dice y hace, es entrar en el misterio de la divinidad: Yo en ti y tú en mí, sin saber ya vivir otra vida, que no sea la divina.

Dile hoy, cuando llegue ese momento de intimidad eucarística:
Estate, Señor, conmigo siempre,
sin jamás partirte,
y, cuando decidas irte,
llévame, Señor, contigo;
porque al pensar que te iras
me causa un terrible miedo
de si yo sin ti me quedo,
de si tu sin mi te vas.

Llévame en tu compañía,
donde tu vayas, Jesús,
porque bien se que eres tu
la vida del alma mía;
si tu vida no me das,
yo se que vivir no puedo,
ni si yo sin ti me quedo,
ni si tu sin mi te vas.
Por eso mas que a la muerte,
temo, Señor, tu partida
y quiero perder la vida
mil veces mas que perderte;
pues la inmortal que tu das
se que alcanzarla no puedo,
cuando yo sin ti me quedo,
cuando tu sin mi te vas.

Amén.
Edu, escolapio

Ciclo B
Tiempo Ordinario
20 DOMINGO


1º lectura: Proverbios 9, 1-6
2ª lectura: Efesios 5, 15-20
3ª lectura: Juan 6, 51-58

Todos los cristianos del mundo entero estamos interiorizando este capítulo sexto del evangelio de San Juan, conocido con el nombre de discurso sobre el Pan de Vida.

Vida. Vivir. Esta es la palabra mágica que encierra la realidad más profunda por la cual lucha el hombre desde que nace hasta que irremisiblemente, vencido, muere. Vivir. “Trabajad no por el alimento que perece y tú con él, sino por el alimento que perdura dando vida eterna” Vivir, sí, vivir, pero para siempre: sin muerte. Esto es lo que deseamos, lo que queremos y por lo que luchamos sin éxito, pues al fin morimos.

“Moisés no os dio pan del cielo, porque vuestros padres lo comieron y murieron. Es mi Padre el que os ha dado el verdadero pan del cielo. El pan de Dios es el que baja del cielo y da la vida al mundo.

Los judíos y nosotros hoy con ellos, después de cerca ya de dos mil años, seguimos pidiendo lo mismo: “Señor, danos siempre de este pan”. Jesús les contestó y hoy nos responde a nosotros: “Yo soy el Pan de Vida; el que viene a mi, ya no tendrá más hambre y el que cree en mi, jamás tendrá sed”

¿De qué tengo yo hambre: de Dios o de mis interese y concupiscencias? ¿A dónde voy a saciar mi hambre, a dónde voy a apagar mi sed? Jesucristo es esa agua viva que apagó la sed de cosas materiales y de sensaciones torpes a la samaritana para toda su vida, hasta le quitó la sed de sus cinco maridos, que nunca lo fueron.

“La voluntad de mi padre es que todo el que ve al Hijo y cree en él tenga vida terna”. Justo, lo que anhelamos, lo que andamos buscando con desasosiego: vida, vida plena, vida eterna. “Yo soy el pan vivo que ha descendido del cielo. Quien comiere de este pan, vivirá eternamente”

¿Qué pan es ese, qué alimento es ese que da vida eterna? Y Jesucristo nos revela, finalmente, que no se trata de ningún alimento, ni de ningún pan; es él mismo, el pan y el alimento: “El pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo”. Carne, es la misma persona de Cristo dada, entregada a los hombres en la Eucaristía. Es Cristo mismo, que nos invita a una identificación con él a través del signo del alimento de pan y vino.

Así, los alimentos cuando los tomamos, cuando los comemos, los hacemos carne de nuestra carne y sangre de nuestra sangre. Y no nos sucede que al comer fruta, nos hagamos fruta, ni al comer cordero nos hagamos borrego, porque, como bien dice Santo Tomás de Aquino, el principio superior asimila e identifica al inferior; así, pues, al comer la carne de Cristo y beber su sangre, al adentrar en nosotros la persona de Cristo, él como principio superior, divino, nos identifica con él, a nosotros humanos, como principio inferior que somos. Un prodigio: el hombre se diviniza, como los alimentos de verduras, carnes y minerales que comemos, los humanizamos. Al comer a Cristo nos divinizamos.

Estos son los tres efectos de la Eucaristía

  1. 1.- Dios no muere. Luego, nosotros tampoco, porque “el que come mi carne y bebe mi sangre tienen vida eterna”. Carne que es todo lo que soy. Adán dirá de Eva: “esta es hueso de mis hueso y carne de mi carne”. Es decir, es como yo. La carne expresa el yo, la persona misma, hasta en sus actividades psicológicas con un matiz corporal. Así, pues, al comer la carne de Cristo, resucitada, nosotros seremos resucitados, al pasar como él la barrera de la muerte. Nueva vida, sin muerte.

  2. 2.- “Quien come mi carne y bebe mi sangre habita en mi y yo en él”. La inmanencia reciproca de Cristo y del cristiano. Estar, permanecer con la persona amada, para siempre en alianza perpetua, más que unos novios, más que unos esposos que locamente se quieren. “Tú, pues, en mi y yo en ti… Todo lo mío es tuyo”, que dice Jesucristo: “todo lo tuyo es mío”, porque sin ti no puedo vivir. Y poder así, por el enamoramiento, sentir y sufrir la nostalgia del alejamiento del amado, como dice San Juan de la Cruz: “¿Por qué, pues, has llagado aqueste corazón, -no lo sanaste? -Y pues me lo has robado, -¿por qué así le dejaste -y no tomas el roba que robaste?”. Y Teresa de Jesús así se expresa: “Estate, Señor, conmigo siempre, -sin jamás partirte -y cuando decidas irte, -llévame, Señor, contigo;-por- que el pensar que te irás -me causa un terrible miedo, -de si yo sin ti me quedo, -de si tú sin mi te vas”.

  3. 3.- Efecto de la Eucaristía, del Pan de Vida, del Cuerpo de Cristo, de Cristo mismo, es la consagración o dedicación por entero a Cristo: “Si tú te me das, yo todo, a ti me entrego: “Así como vivo yo para mi Padre, así también, el que me come, vivirá por mi y para mi”. El Pan que Cristo multiplica y da, no es para llenar estómagos, que para eso nos dotó el Señor, Dios, de inteligencia, voluntad y manos para ganarnos el pan de cada día. Nos dejó herramientas y tiempo, como dice León Felipe; “Aquí vino y se fue, Vino, nos marcó nuestra tarea y se fue. Aquí vino y se fue. Vino, llenó nuestra caja de caudales con millones siglos y de siglos, nos dejó unas herramientas y se fue”


El pan que Cristo nos da es su propio cuerpo, su propia carne y sangre, es decir, su propia vida. Viene a saciar nuestra hambre de Dios, nuestra hambre de amores y para ello tenemos que vaciarnos de nosotros mismos antes de comulgar. Vaciarnos de nuestras ideas y pensamientos soberbios, de nuestro querer prepotente, de nuestros sentimientos vulgares y plebeyos…, para que Cristo pueda habitar en nosotros. Que nos llenen sus pensamientos y su voluntad.

Si estoy lleno de mi, Cristo no puede habitar en mí. Comeré un trozo de pan, pero nos saciaré mi hambre de Dios y como mendigo iré mendigando amores, que me esclavizan y me degradan.

Me tengo que vaciar a la manera de San Juan de la Cruz, que dice: “Para venir a tenerlo todo, no quieres tener algo en nada. Y cuando lo vengas todo a tener, has de tenerlo sin nada querer. Porque si quieres tener algo en todo, no tienes puro en Dios tu tesoro”. “Porque donde está tu tesoro, allí está tu corazón”, que nos dirá Jesucristo. Y hoy nos recuerda que: “Quien come mi carne y bebe mi sangre habita en mi y yo en él”.
Señor, enséñame,
Señor enséñanos en esta Eucaristía
a beber tu sangre,
a comer tu carne y
a vivir en ti, por ti y para ti.

Amén

Edu, escolapio

Ciclo B
Tiempo Ordinario
21 DOMINGO


1ª Lectura: Josué 24, 1-2.15-17.18
2ª Lectura: Efesios 5, 21-32
3ª Lectura: Juan 6, 60-69

En este domingo 21 ponemos el broche de oro a esta catequesis global durante cinco domingos sobre el capítulo 6 del evangelio de San Juan sobre la EUCARISTÍA
- Se nos revela esas Bodas de Dios con su Pueblo.
- Son los Esponsales de Jesucristo con su Iglesia.
- Es la Alianza para vivir una misma vida, vivir en un solo amor
Hoy, pues, se pone a nuestra consideración en las tres lecturas, bajo aspectos o prismas diferentes, el fenómeno y a la vez misterio de la Alianza de Dios con la Humanidad.
- En la primera lectura se narra la Alianza en Siquén entre una masa o multitud, que se convierte en pueblo por la fuerza de la misma Alianza, que busca la comunión entre Dios y ese pueblo que acaba de nacer.
- En la segunda lectura se nos habla de la Alianza de Jesucristo y de la Iglesia, que es paradigma o modelo de la Alianza de los esposos, ambos, misterio insondable, que nos deslumbra y nos realiza en nuestro propio ser, cuanto más lo profundizamos más somos nosotros mismos
- En la tercera lectura, en el evangelio, se nos habla de la Alianza, que se convierte en Comunión de Dios con el ser humano, y del ser humano con Dios, bajo el signo del Pan de Vida.
Lo contrario a la Alianza es la dispersión.
La dispersión deshace, debilita, lleva a la destrucción, acaba en muerte.

La unión, en cambio, del ser, del individuo, de la persona consigo mismo; la unión del grupo, del pueblo, de la pareja, los autentifica, los hace, los realiza, los fortalece, los construye, los lleva a la vida, a su propio ser. El pueblo se hace pueblo y la pareja se hacen personas.

En la primera lectura,
vemos las estipulaciones del contrato o Alianza: “Lejos de nosotros abandonar al Señor para servir a dioses extranjeros”. El clan de la casa de José culturizará a los otros clanes y les hará “tener una historia”: la del éxodo y la Alianza, abandonando de esta manera a los falsos dioses o ídolos. Pues toda Alianza supone una conversión.

La Alianza constituye a un pueblo en torno a una fe común y a un culto común. Israelí nació políticamente y culturalmente en el momento en que reconoció al Dios único en la Alianza que hizo con Dios.

Nacionalidad y religión son inseparables. A medida que se purifica y afina la relación con Dios, la convivencia entre los seres humanos se eleva, la nacionalidad se siente, el pueblo vive como tal pueblo y tiene historia; no vive en un anonimato salvaje.

En la segunda lectura,
pasamos de la Alianza de un pueblo con Dios, a la Alianza de Jesucristo con la Iglesia, a las Bodas del cordero, donde alcanza la plenitud el amor de Dios al hombre, y es como os decía, paradigma o modelo de la Alianza de los esposos, del amor en el matrimonio. “Serán los dos una sola carne”; una sola vida”.

Descubren los esposos una identidad e igualdad radical en el matrimonio que nace de su propia naturaleza, creada y querida por Dios-creador.

Adán al ver a Eva, después de haber visto todos los animales y habiendo tenido el honor y la satisfacción de darles el nombre apropiado, sacándoles del anonimato, habiéndole otorgado el Creador ese privilegio, dijo, repito, al ver a Eva: “Ésta es hueso de mis huesos y carne de mi carne”. Es decir, Adán ve “otro él” en la mujer, que Dios le presenta. Identidad e igualdad: “otro él”.

“Ésta sí que es carne de mi carne y hueso de mis huesos” y no como la “carne de los animales que acaba de darles nombre. Y así los esposos son la “carne única” en el matrimonio. “Y serán los dos una sola carne”. Adán ve “otro él” en Eva. Y ella ve en Adán, “otra ella”.

La “carne” es, pues, la persona, “el yo” pero con un matiz corporal en su actividad.

Esta asociación del hogar cristiano con los esponsales de Jesucristo y de la iglesia se realiza concretamente por medio del bautismo, que nos hace miembros de Jesucristo: “porque somos miembros de su cuerpo”. Y así nos da acceso al misterio de Jesucristo y de la Iglesia: “que es un gran misterio éste y yo lo aplico a Jesucristo y a la Iglesia”. Jesucristo es más Jesucristo a medida que la Iglesia es más Iglesia.

Traducido en otro lenguaje podríamos decir: la Iglesia o pueblo es más pueblo a medida que su relación con Dios es más pura, más esclarecida, más íntima.

Y a nivel de matrimonio o de Alianza: la obediencia de la esposa será cada vez más amorosa y no temerosa, al descubrir en su marido a Jesucristo: “Las mujeres que obedezcan a sus maridos, como al Señor”.

Pero si el marido no trabaja y lucha y se esfuerza en ser otro Jesucristo, ¿cómo va a poder la esposa obedecerle si en él no descubre a Jesucristo, sino un engaño, una farsa, un fraude, un intruso, un parásito en el hogar?

Cuando la mujer encuentra en su esposo la imagen, cada vez más clara de Jesucristo, del Señor, se constituye en persona, se libera, se siente hecha y realizada por virtud de la dinámica del misterio del matrimonio, que es entregarse a Dios, como María, que se entregó de tal manera, que se dijo “esclava”: “Por esto dejará el hombre a su padre y a su madre y se unirá a su mujer y serán los dos en una carne. Gran misterio es éste y yo lo aplico a Jesucristo y a la Iglesia”.

La Eucaristía se desdibuja como alimento, como banquete y se convierte en lo que verdaderamente es: en matrimonio, en Alianza, en las Bodas del Cordero contigo, con la humanidad.

Y esto, esta realidad de la Eucaristía, este lenguaje en el que se revela y se expresa, así lo ha querido Jesucristo, porque es la realidad que mejor manifiesta en los seres humanos el sueño, la ilusión y el amor: los esponsales y el matrimonio.

La Eucaristía son esponsales que me llevan poco a poco a celebrar con Dios el matrimonio en esa Bodas eternas del Cordero.

Empecemos los esponsales, al menos en esta Eucaristía. No perdamos ya ninguna ocasión para decirle:
¡Ay! ¿quién podrá sanarme?
Acaba de entregarte ya de vero;
no quieras enviarme
de hoy más mensajero,
que no saben decirme lo que quiero
Por otra parte y a medida que el esposo ama y se entrega a su mujer, su autoridad se convierte en servicio de santificación y así él se siente cada vez más integrado al vencer la dispersión destructora del egoísmo, de la pasión y de la egolatría. Que es todo ello aborrecimiento de sí mismo.

“Vosotros, los maridos amad a vuestras mujeres, como Jesucristo amó a la Iglesia y se entregó por ella para santificarla… El que ama a su mujer, así mismo se ama y nadie aborrece jamás, su propia carne”. Es un vaciamiento del “Yo” para que te pueda habitar “el Tú” y formar “una sola carne”, es decir: -un solo pensar –un solo querer – un solo hacer –y un solo sentir. “Una sola carne”

Cuentan que el día que un novio se declaró a su novia, fue temprano al día siguiente a su casa y llamó con fuerza a la puerta, como conquistador.

Y la voz de la novia, casi imperceptible, preguntó:

-¿Quién eres?
Y el novio, con voz de trueno, respondió: Soy “YO”

Y un silencio denso invadió el entorno.
Y la puerta no se abría.

El novio, después de mucho esperar, se marchó enojado, a la vez que pensativo.
Volvió al día siguiente muy de mañana. Llamó con menos fuerza y más moderación al postigo del portón. Se oyó la misma voz del día anterior, que preguntaba:

-¿Quién eres?
Y el novio, esta vez, con voz dialogante, respondió: -Soy “TÚ”

Y la puerta se abrió al momento.

En conclusión, nos encontramos ante un “misterio”, como el de la Eucaristía, porque el matrimonio, que forma y construye las familias y también los pueblos, están transidos por el amor, que es su alma y su motor.

Y la Eucaristía es un misterio de amor: “un matrimonio”

Y Jesucristo no atenúa o disimula para nada tal misterio de amor, lo refuerza incluso, bajo el riesgo de quedarse casi solo, pues el evangelio no puede reducirse a una predicación moral, incluso generosa de: “amaos los unos a los otros”.

Es más, mucho más. Es misterio insondable de vida y de amor. Pero preferimos la muerte antes que el compromiso y así sucedió que “desde entonces -como nos lo narra el evangelio de hoy- muchos discípulos suyos se echaron atrás y no volvieron a ir con él”. Prefirieron la muerte, porque la claridad y el modo concreto y misterioso de hablar de Jesucristo era inaceptable: “Este modo de hablar es duro ¿quién puede hacerle caso?” Comprometía demasiado, pues suponía y exigía: -vivir una sola vida, en un solo amor-.

“Así como yo vivo para mi Padre, así también el que me come vivirá para mi” Hay, pues, que darse del todo, porque él quiere celebrar con nosotros “unas Bodas”, hacer una Alianza eterna, un misterio insondable: “quien come mi carne y bebe mi sangre habita en mi y yo en él” Habitar, permanecer, estar con Dios y Dios con nosotros. Estar para siempre con alguien a quien se ama y nos ama. Para siempre felices, en intimidad interminable.

La fe en todo esto, no es ante todo una “enseñanza” sino “un compromiso”, un requerimiento. Hay que elegir… y muchos se van.

Jesús dijo entonces a los doce y hoy nos lo dice nosotros: “¿También vosotros queréis marcharos? -La respuesta de Pedro ya la sabemos-: “Señor ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna; nosotros creemos y sabemos que Tú eres el Santo consagrado por Dios”

Para Pedro y sus pocos compañeros, Jesucristo es irremplazable.

¿Cuál es nuestra respuesta… si la tenemos?
¿Comprometida y esperanzada, como la de Pedro?
Que esta Eucaristía,
que vamos a revivir
nos ayude a entrar en este misterio
de amor, de esponsales, de boda, de matrimonio.

Amén

Edu, escolapio